El tiempo pasa. Eso es una verdad inconfundible e irreparable.
Me ha dado desde que tengo 23 por recapitular.
Los regalos que hago a mis amigos, los amigos que pierdo, los que gano (pocos), pues todos entran en mi capítulo de recapitulación.
La verdad es que no sabemos lo que nos va a deparar la vida, así que propongo que la gente pare. Recapacite, cierre historias y luego abra las siguientes.
Grito desde aquí al optimismo y a que la gente aunque nos joda salga de sus madrigueras y vuelva a soñar con que puede llegar a ser alguien en la vida.
Se acabó el mal rollo, es el momento de ilusionarse por freir un huevo sin que te salte aceite, por llegar a casa y ver que no te has dejado las llaves dentro, por tener buena salud y sobretodo por seguir escribiendo estatus.
que gran palabra. Status.
Una cosa más a modo de opinión gratuita: quien tiene el poder de parar y mirar atrás para hacer un status constructivo es quien tiene realmente el poder, aquel que ha vivido algo más que la puta inercia a la que se ve empujado de por vida por el dia a dia.
Esto huele a algo bueno... y aunque sea malo, seguiré pensando que es bueno.
y ya está, y esa es la noticia.
h.
